lunes, 7 de noviembre de 2011

Anillos

Trabajar en un pequeño formato es ventajoso. No se necesita tanto espacio para hacer las piezas y el tiempo de ejecución se reduce considerablemente. La joyería permite que las obras y sus materiales estén en contacto con quien las lleve. Estos materiales se desgastan con el uso y adquieren un valor sentimental proporcional a su desgaste; se le añade un cuidado y una responsabilidad. 

He seleccionado las maderas teniendo en cuenta la dureza y el color. El trabajo con maderas duras o muy duras te permite obtener unos acabados y detalles que serían imposibles con otras maderas más blandas. Además, el grano tan fino de éstas le proporcionan a la pieza una impermeabilidad casi ilimitada. 

Después de una idea, se maduran algunos dibujos básicos e incluso detallados, pero no siempre son necesarios. Las modificaciones de la idea, en el proceso de trabajo, suelen ser habituales. Es más importante la harmonía del conjunto que la primera idea. El rigor de esta última se disipa en el fluido de las formas a través del camino. 


madera de ébano negro y boj

maderas de roble americano, coral, boj, ébano, amaranto y sucupira



maderas de guayacán, ébano, boj, sucupira y cedro


oro de 18 quilates, madera de ébano negro y jacaranda

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